Decisión nº: 003516

En junio de 2008, el Comité Ejecutivo del Fondo de 1992 tomó nota de que, en abril de 2008, el Tribunal de Comercio de Lorient había dictado sentencia respecto a una reclamación de un hotel-restaurante por pérdidas económicas y por daños morales y daños a su imagen. Se señaló que la reclamación había sido rechazada por el Fondo de 1992 porque el demandante no había probado la cuantía de su pérdida y, en todo caso, porque los daños morales y los daños a la imagen reclamados no eran admisibles en virtud de los criterios de admisibilidad del Fondo de 1992. Se señaló asimismo que el tribunal había afirmado que no estaba sujeto a los criterios de admisibilidad del Fondo de 1992 y que le incumbía interpretar el concepto de ‘daños ocasionados por contaminación’ y aplicarlo a la reclamación concreta determinando si existía una relación de causalidad suficientemente estrecha entre el suceso que llevó a los daños (‘le fait générateur’) y las pérdidas sufridas. El Comité observó que el tribunal había hallado que el demandante había sufrido pérdidas económicas que evaluó en una cuantía considerablemente inferior a la reclamada, pero había rechazado la reclamación por daños morales y a la imagen. Se tomó nota de que el Director, teniendo en cuenta que el tribunal había rechazado los conceptos no admisibles en virtud de los criterios del Fondo y que no estaba en juego una cuestión de principio en lo referente al concepto aceptado por el tribunal, consideró que la evaluación de ese concepto por el tribunal no era injustificada y que el Fondo no debía apelar contra la sentencia.